A veces una música nos calma, y no sabríamos decir por qué.
Desde tiempos inmemoriales, el sonido (y ciertas frecuencias) han sido herramientas para calmar las mentes agitadas y encontrar un equilibrio interior.
Los antiguos egipcios ponían énfasis en las "vocales" en sus cantos porque les atribuían virtudes terapéuticas. Los monjes tibetanos usan cuencos para emitir vibraciones que serían "la manifestación del Universo".
Aunque ningún estudio demuestre hoy estos efectos, millones de personas se duermen escuchando estas frecuencias.
HoomBand no se ha privado de añadirlas, de diferentes maneras, a sus sonidos e historias hipnóticas.
Porque hay tantos perfiles de dormilones como dormilones, la aplicación la aplicación Livlab (disponible en iPhone y Android) se quiere la más completa posible, para aportar una solución personalizable, según el humor o la sensibilidad de cada uno.
En este artículo, intentamos entender cómo funcionan las frecuencias sagradas y cómo hemos decidido incluirlas en nuestros contenidos.
Resumen:
- 1- ¿Qué es exactamente una frecuencia sagrada?
- 2- Su eficacia en la calidad de su sueño
- 3- Las frecuencias sagradas, espolvoreadas en nuestras historias y sonidos
1- ¿Qué es exactamente una frecuencia sagrada?
Como decía el famoso ingeniero e inventor Nikola Tesla: “Si quieres conocer los secretos del Universo, piensa en términos de energía, frecuencia y vibración”.
Cada ser humano emite una vibración según su estado y su humor (ver nuestro artículo sobre las frecuencias binaurales).
Las “frecuencias sagradas” tendrían la capacidad de “armonizar” nuestras frecuencias y vibraciones para calmar los cuerpos y las mentes, porque estarían alineadas con las frecuencias originarias de la Tierra.
Se trata por tanto de musicoterapia, con un efecto más profundo que simplemente escuchar música por placer.
En el siglo XI, Guy d’Arezzo, un monje benedictino, formaliza un método de aprendizaje de la música, que se basa en 6 notas (o frecuencias): ut re mi fa sol la. Son las primeras sílabas de cada medio verso de un canto religioso latino: el Himno a San Juan Bautista.
Cabe saber que algunos antiguos cantos gregorianos se construyeron a partir de esta estructura, supuesta para dar bendiciones espirituales durante la misa religiosa.
Este solfeo sagrado, luego caído en el olvido hasta los años 1960, es retomado por el físico Josephe Puleo que recompone la escala desaparecida basándose en el estudio de los números de Pitágoras y de la Biblia.
Entonces pone de relieve 9 gamas, hoy llamadas “frecuencias sagradas”.
Estas 9 frecuencias estarían todas asociadas a un “efecto” sobre el cuerpo y la mente humana:
- 174 Hertz : proporcionaría una sensación de seguridad y reduciría el dolor físico
- 285 Hertz : dinamizaría los órganos y permitiría que los tejidos se regeneren
- 396 Hertz (ut) : liberaría de la culpa y el miedo
- 417 Hertz (ré): facilitaría el cambio
- 528 Hertz (mi) : repararía el ADN (también llamada la “frecuencia de los milagros”)
- 639 Hertz (fa) : armonizaría las relaciones y mejoraría la comunicación
- 741 Hertz (sol) : permitiría poner la mente en posición de encontrar una solución y llevar una vida más sana
- 852 Hertz (la): despertaría la intuición
- 963 Hertz (si) : permitiría unificarse profundamente y conectarse con la “energía universal”
Evidentemente, usamos el condicional porque nada de esto ha sido probado científicamente.
2- Su eficacia en la calidad de su sueño
Casi no hay estudios sobre las frecuencias sagradas, pero su fama se ha hecho de forma empírica: los oyentes sienten que estas frecuencias los calman y... eso es todo.
Escuchar estas frecuencias calmaría la mente y permitiría conciliar el sueño más rápidamente.
Según las investigaciones del Dr. Alan Watkins, un investigador en neurociencias del Imperial College de Londres, los cantantes de cantos gregorianos tienen, durante su actuación, una tensión arterial y presión sanguínea más baja que en estado normal.
Los científicos también se dieron cuenta de que los monjes gregorianos necesitaban poco sueño (¡2 horas al día para algunos!).
Aquí, por lo tanto, no se trata de creer o no creer, sino de sentir.
3- Las frecuencias sagradas, espolvoreadas en nuestras historias y sonidos
La aplicación Hoom no ofrece pistas de audio con solo frecuencias sagradas, lo cual no sería muy agradable de escuchar.
Preferimos entonces “envolverlas” incluyéndolas en muchas historias hipnóticas, como banda sonora de fondo o en nuestras meditaciones guiadas para potenciar su poder relajante.
Hacemos un resumen
Las frecuencias sagradas y tu HoomBand son por lo tanto particularmente efectivos:
- si tienes dificultad para entrar en un estado de relajación profunda
- si estás atrapado en pensamientos ansiosos o estresantes
Aquí hay un ejemplo de su contenido con frecuencias sagradas disponible en la aplicación Livlab (disponible en iPhone y Android) :
Nuestra biblioteca de sonidos e historias se actualiza frecuentemente. ¡Cada noche, su ambiente!
Descubre los otros ingredientes de HoomBand para ayudarte a dormir: